Protección solar, tipos de piel y manchas

La radiación solar tiene siempre incidencia sobre nuestra piel, y lo cierto es que la prevención nunca es poca en este sentido, sobre todo para todas aquellas personas que son propensas a padecer de manchas en la piel. Conocer el tipo de piel que se tiene y cuál es su respuesta al sol (lo que se llama el fenotipo) es crucial para poder actuar.
Aún a riesgo de parecer exagerada, yo recomendaría a todos los que son propensos a la aparición de las manchas que empleran cremas con protección solar durante todo el año, llueva o no llueva. A continuación detallo los distintos fototipos y la protección que necesitan.

Los fototipos más bajos son el I y el II: pertenecen a las personas con piel blanca y ojos claros, que suelen quemarse con facilidad y casi nunca se ponen morenas. Este tipo de piel es el que más riesgo presenta en cuanto a la aparición de manchas, por lo que la protección más adecuada es la más alta posible, incluso de pantalla total.
Los siguientes fototipos son el III y el IV. En este caso, se trata de pieles de tono más dorado y ojos castaños. Es más difícil que se quemen y tienden a broncearse a medio plazo; de todas formas, todavía hay riesgo de que aparezcan manchas, así que lo mejor es usar un factor de protección de 20 o superior.
Por último, quedan los fototipos V y VI, que corresponden a personas con piel morena/negra y pelo y ojos oscuros. Este tipo de piel no se quema apenas y se broncea a gran velocidad; pero es indispensable que usen también crema de protección, aunque basta con un 10 o un 15.